Para los que nos dedicamos a este trabajo tan gratificante de contar historias, éste es uno de los momentos más especiales con los que nos podemos encontrar jamás...

Don Antonio, el sacerdote que oficiaba la ceremonia, decía:

"Cuando una pareja de novios va a la iglesia a casarse, cuantas cosas pueden pasar...Pero cuando una pareja, después de cincuenta años, viene a la iglesia, a decirle al Señor, que se siguen amando, que se siguen queriendo... es porque hay un amor muy grande y muy profundo, que lo han sabido ir contruyendo alrededor de una familia a la que aman..."

Ésta es la más grande prueba de Amor que existe.